lunes, 6 de noviembre de 2017

La historia se repite (I)

"Estos catalanes parecen chiquillos y me da mucho que hacer para traerles al buen sentido... Nadie está obligado a nada, nadie quiere ni puede exigirle a otro su obligación... Engreimiento de advenedizos, insolencia de separatistas, deslealtad, disimulo, palabrería de fracasados... Es más fácil hacer una ley aunque sea el Estatuto capaz de satisfacer las aspiraciones de Cataluña que arrancar la raíz de este sentimiento de pueblo incomprendido y vejado que ostentan algunos de ustedes".

Extracto de escritos de Manuel Azaña, presidente de la II República, en 1936 y 1937, mostrando su desencanto con el comportamiento de los catalanes, a los que tanto ayudó hasta llegar al desencanto.

La historia se repite (II)

«La opinión pública catalana, que está harta de abusos, de locuras y de traiciones, no se manifiesta porque la aterrorizan… Todo este sistema ha sido destruido. No puede admitirse que la autonomía se convierta en un despotismo personal, ejercido nominalmente por Companys, y, en realidad, por grupos irresponsables que se sirven de él».

He asistido en Cataluña, estupefacto, al desarrollo de la más desatinada aventura que se puede imaginar… No se han privado de ninguna trasgresión, de ninguna invasión de funciones... Como ejemplo de las extralimitaciones y abusos de la Generalidad, que no caben ni en el federalismo más amplio, han creado delegaciones de la Generalidad en el extranjero... La salvación y el prestigio de la autonomía depende de ustedes. No ha sido ni el Estado ni los 'centralistas' quienes los han comprometido».

Más palabras de Manuel Azaña, en 1937, sobre Cataluña. No describe, sino que calca la situación que ahora se repite. ¿No ha servido de lección para nadie lo que dijo Azaña hace 80 años? ¿Han leido a Azaña nuestros gobernantes?