sábado, 27 de agosto de 2016

La Batalla del Puente de Triana

La invasión francesa en Sevilla tuvo lugar el 1 de febrero de 1810 en el contexto de la invasión de las tropas napoleónicas y de la Guerra de la Independencia.

José Bonaparte reinó en España desde 1808, tras la ocupación de Madrid el 23 de marzo, con el nombre de José I. 

En 1812 el Duque de  Wellington empezó su avance en España. El 6 de abril Badajoz cayó y los franceses sufrieron una derrota aplastante en la batalla de Los Arapiles, en Salamanca, el 22 de julio de ese año. 

Cádiz, en la época del sitio por las tropas napoleónicas

El 24 de agosto, el mariscal francés Claude Victor levantó el sitio de Cádiz, que se mantenía desde el 5 de febrero de 1810, al recibir órdenes de ayudar al rey José en Madrid. Wellington ordenó al general Cooke de los First Foot Guards en Cádiz liberar la ciudad de Sevilla. Los aliados, incluyendo seis compañías de los First Foot Guards bajo el coronel Peregrine Maitland, navegaron a Huelva el 10 de agosto con un ejército de unos 4.000 soldados para emprender la liberación de Sevilla. 

En las crónicas figuran reflexiones de personajes históricos como el británico capitán Alex Dallas: “Es imposible describir la emoción de nuestro espíritu con la sensación de libertad después de estar confinado dentro de un círculo de murallas fortificadas durante muchos meses. Esta es la sensación que sentimos al poder caminar libres por el campo abierto”. 

El 27 de agosto de 1812 las tropas españolas, con ayuda de los británicos, fuerzan al mariscal Nicolás Jean de Dieu Soult a abandonar Sevilla tras la que fue llamada la batalla del Puente de Triana.

La batalla del Puente de Triana, de William Heath

Soult decidió establecer su cuartel general en Sevilla, en el Palacio Arzobispal, situado en la Plaza Virgen de los Reyes. Mientras el mariscal galo coordinaba a las tropas en la capital hispalense y proseguía con el expolio de obras de arte, las tropas españolas, al mando del general Juan de la Cruz Mourgeon, lanzan el 16 de agosto de 1812 una gran ofensiva desde Huelva, con un sol abrasador, según reseñas de la época, cosechando victorias con la ayuda de británicos, con el coronel John Byrne Skerret y el teniente coronel John Scrope Colquitt al frente, y portugueses. 

A los aliados se les unió John Downie, un aventurero escocés amigo de Scrope, que había formado un ejército privado de extremeños para combatir en la Guerra de la Independencia apoyando al Duque de Wellington.


John Downie

Una de las plazas que se ocuparon en esa ofensiva fue La Palma del Condado, municipio onubense a 50 kilómetros de Sevilla. Allí un grupo de españoles forma la División Cruz. 

Downie usaba la espada de Pizarro y entabló un vínculo muy especial con su legión, que vino a llamar la Leal Legión Extremeña. 

LAS TROPAS ALIADAS POR EL ALJARAFE

El 24 de agosto marcharon desde Manzanilla a Sanlúcar la Mayor donde tomaron el pueblo sin una sola pérdida. El 26 de agosto en Espartinas los aliados fueron informados de que los franceses estaban a punto de abandonar la ciudad de Sevilla. 

Sevilla situada en su mayor parte al Este del Guadalquivir, se encontraba unida a la vega de Triana, en el margen oeste del río, sólo por un puente.

En las primeras horas del día 27 de agosto las tropas aliadas ya están llegando a la Cornisa del Aljarafe, llegando a la localidad de Castilleja de la Cuesta. Allí tienen el primer encontronazo serio con los franceses, que intentaban detener el avance español. Esta contingencia se saldó con una victoria española gracias a la División Cruz.

Mariscal Soult

La comarca del Aljarafe limita al Noreste con Sevilla. Al ver Soult que los españoles y aliados se aproximaban a la Vega, descendiendo los cinco kilómetros de distancia desde Castilleja, decide reforzar sus tropas en el Altozano, en Triana, y en la entrada del Puente de Barcas,  para evitar así que tomaran el puente que les permitiría cruzar el río y acceder a la ciudad. La batalla tendría lugar en un tiempo estival, en el que, fácilmente, se alcanzan los 40 grados Celsius... a la sombra.

Tras comenzar el combate, continuo, los vecinos se van sumando a los aliados, que logran llegar al Altozano. Los franceses se encuentran ahí fuertemente atrincherados. 

EMPIEZA LA BATALLA DEL PUENTE DE TRIANA

Los aliados intentarían tomar el puente en oleadas, al uso militar de la época.

Hasta en dos ocasiones fracasaron, sufriendo pérdidas numerosas. Pero al tercer intento fue la vencida-con completo significado de la expresión-, desmontaron la defensa gala y tomaron el puente obligando a los franceses a su retirada.

General De la Cruz

Durante la batalla John Downie cargó contra los franceses a caballo con la espada en la mano y, cuando intentaba el asalto del puente a caballo, fue herido y abatido de su montura. Antes de ser apresado por los franceses arrojó la espada de Pizarro a los extremeños para evitar que los enemigos se hicieran con ella.

Los franceses se dirigieron a Granada primero y a Murcia después. Los británicos tomaron el control de Alcalá de Guadaíra, que había sido abandonado por los franceses, y dieron descanso a las tropas.

El Teniente Coronel John Scrope Colquitt murió varios días después.

El lugar del puente es hoy donde se encuentra el Puente de Isabel II, edificado en 1852, y más conocido como Puente de Triana. 

El Altozano se configura hoy como una plaza pública en el lado Oeste del Puente.

Este domingo, 27 de agosto de 2017, se cumplen 204 años de la liberación de Sevilla.

jueves, 11 de agosto de 2016

Blas Infante, 80 años de un asesinato

Su asesinato la noche del 10 al 11 de agosto de 1936, en el km. 4 de la antigua carretera de Sevilla a Carmona, fue justificado y legalizado por el franquismo con una sentencia de muerte posterior, en 1940. 


Sin embargo, su figura ha ido creciendo con el paso de los años y su legado, al que intereses dispares procuran desde entonces maleabilidad histórica, se va conociendo poco a poco y sometiendo a análisis profundo en el contexto de la época.


Blas Infante ha sido reconocido como el primer patriota que luchó por la identidad y los derechos de los trabajadores del Pueblo andaluz y por el suelo que pisaron sus contemporáneos, "Padre de la Patria Andaluza e ilustre precursor de la lucha por la consecución del Estatuto de Autonomía para Andalucía".

Nació en la calle de la Carrera Nº 46 en Casares, municipio de la provincia de Málaga, el 5 de Julio de 1.885.

Sus estudios primarios los realiza en la escuela de Casares.
En 1902 se examina para la obtención del Grado de Bachiller en el Instituto Vicente Espinel de Málaga.

En el 1906 se Licencia en Derecho y cursa también estudio de Filosofía y Letras.

En 1907 regresa a Casares.

En 1909 aprueba las oposiciones de notario y tiene que esperar un año hasta cumplir los 25 años para poder ejercer de notario.

En 1910 se va de notario a Cantillana (Sevilla), donde toma contacto con el ambiente intelectual sevillano, con las ideas políticas regionalistas y con los miembros del ateneo sevillano, donde escucha los discursos nacionalistas pronunciado por Mario Méndez Bejarano.

En 1913 expone en Ronda sus ideas políticas y socioeconómica de Andalucía. Y nace la revista "Bética".

Su apoyo es incondicional a la Reforma Agraria y a la alteración profunda de la propiedad de la tierra enfrentando los intereses de la burguesía agraria andaluza (tan importante en el sostenimiento del Estado español desde la segunda mitad del siglo XIX) a los del pueblo trabajador. Ya en una fecha tan temprana como 1913 manifiesta:

“…ha llegado la hora que el privilegio muera: no puede persistir la terrible impunidad que divide a los hombres en señores y esclavos: no puede perdonarse ese crimen monstruoso que premia el vicio y castiga la virtud, que otorga al ocio todos los placeres e infringe al trabajo todas las virtudes. Ha llegado la hora de que el hombre se emancipe del yugo del hombre…”

En 1914 hace una ponencia sobre ideal andaluz en el Ateneo de Sevilla.

En 1915 publica su libro "Ideal andaluz", donde expone su punto de vista sobre los problemas andaluces, su historia y sus propuestas.

En Enero de1918 propone recuperar la vieja bandera andalusí, verde y blanca, y crea el escudo andaluz inspirándose en un escudo con Hércules de la Ciudad Cádiz en la primera asamblea regionalista andaluza celebrada en Ronda. En esa asamblea también se establecen las bases políticas inspiradas en la Constitución Cantonal de Antequera de 1883. 

En 1933 compone la letra del Himno de Andalucía, adaptándola de las antiguas melodías de canciones religiosas que entonaban los jornaleros andaluces al finalizar su jornada de trabajo. En este año se aprueban las bases del anteproyecto del estatuto de Andalucía en Córdoba.


El 5 de Julio de1936 en la Asamblea de Sevilla es elegido Presidente de Honor de la futura Junta Regional de Andalucía, que esperaba someterla a un referéndum en septiembre, pero el 18 de julio una rebelión militar contra el gobierno de la república lo impide.

El 7 de Julio se estrena el Himno de Andalucía.

El  2 de Agosto de 1936 fue detenido por  el sargento Crespo, de Falange, y otros, en su casa de Coria del Río y lo llevaron a Sevilla para ser encerrado en el antiguo cine Jáuregui.

El 11 de Agosto fue fusilado en la carretera de Carmona a Sevilla, junto a la antigua Huerta de las Clarisas sin juicio ni sentencia junto con otros dos detenidos.


El Tribunal de Responsabilidades Políticas, creado después de la guerra, que lo acusaba: “formó parte de una candidatura de tendencia revolucionaria en las elecciones de 1931 y en los años sucesivos hasta 1936 se significó como propagandista de un partido andalucista o regionalista andaluz”, lo condena a muerte y a una multa económica a sus descendientes. 

martes, 9 de agosto de 2016

La Sanjurjada

Se conoce como La Sanjurjada al fallido golpe de Estado que intentó parte del ejército español tal día como hoy, 10 de agosto, de 1932 contra la II República. 

En la imagen, Sanjurjo por las calles de Sevilla tras el golpe, con su hijo capitán de artillería, un coronel de la Guardia Civil  y el general García de la Herranz, que estaba en la reserva después de haberlo solicitado.

Estuvo liderado desde Sevilla por el teniente general 
José Sanjurjo Sacanell (Pamplona28 de marzo de 1872-Estoril20 de julio de 1936) destacado militar español durante el primer tercio del siglo XX, a quien el rey Alfonso XIII concedió el título de marqués del Rif por su amplia participación durante la guerra del Rif, en especial durante el desembarco de Alhucemas.

Foto de la época de la guerra del Rif

El general Sanjurjo ocupó importantes puestos durante la monarquía alfonsina, en la Dictadura de Primo de Rivera y durante los primeros tiempos de la Segunda República


Sin embargo, no tardó mucho en distanciarse del nuevo régimen republicano y protagonizó el fallido golpe de estado. Fue detenido en Huelva, cuando pretendía refugiarse en Portugal, y encarcelado. Condenado a pena de muerte,
 le fue conmutada por cadena perpetua. Durante el segundo bienio republicano logró la excarcelación, concedida por el gobierno de derechas salido de las elecciones de 1933. Se exilió en Portugal

Fue uno de los militares implicados en el Golpe de Estado de julio de 1936, y estaba previsto que fuera el comandante en jefe del bando sublevado al inicio de la rebelión. El 20 de julio, cuando iba a tomar el avión para trasladarse a la zona sublevada y tomar el mando, sufrió un accidente durante el despegue de la avioneta y falleció.

El general Sanjurjo se despide de su esposa antes de subir a la Puss Moth, pilotada por el militar y aviador Juan Antonio Ansardo, en el campo de fortuna de Boca do Inferno, en Estoril.

La Sanjurjada constituyó el primer levantamiento de las Fuerzas Armadas contra la República desde su instauración en 1931, y su fracaso convenció a muchos políticos  republicanos de que el peligro de las conspiraciones había pasado y la aceptación de la República era definitiva. 

El tiempo demostró que estaban equivocados.

sábado, 6 de agosto de 2016

El puente de los hermanos Marx

Es como el del 'Quinto Centenario' de Sevilla, tamaño pueblo. El 'puente de la carretera de Benacazón', que soporta un tramo de las vías del tren de la línea Sevilla-Huelva, es tan estrecho que no sirve para los peatones. Desde Sanlúcar la Mayor los sanluqueños no deben cruzarlo ni los vecinos de Benacazón, tampoco. Y el ida y vuelta, ya ni les cuento.

Desde el punto de vista del viandante de carretera secundaria, el sanluqueño está aislado respecto de Benacazón, salvo pena de la autoridad.

Sí, sí... ¿cómo salva un transeúnte el puente en su camino desde Sanlúcar hacia Benacazón o viceversa?

Una pregunta tan sencilla nunca ha tenido una respuesta tan compleja.
 El asunto suena a cachondeo. El diseño de la vía bajo el puente no permite el paso de peatones. La estrechez del ojo, que antaño también sirvió a carretas y carretones,  coches de caballos y caballistas, ciclistas y motoristas, excluye hoy al peatón, no por humildad circulatoria con menos derecho en la utilización de la red de vías públicas.

Es verdad que el paso para peatones brilla por su ausencia. Es verdad que no existe acerado ni arcén. Es verdad que los vehículos se ceden el paso en su tránsito por la peculiar estructura del puente y, es verdad, el usuario a pie de la vía corre un riesgo vinculado a su seguridad en ese punto.

Y si no se han percatado de esta situación, ya se encarga un agente de la autoridad, con competencias en tráfico, dispuesto a que se cumpla la normativa vial, con advertencias de sanciones monetarias a los sufridos peatones por tamaña falta... la de pasar a pie bajo el puente.

Quizás le falte el romanticismo de 'Los puentes de Madison' o la beligerancia de 'El puente sobre el río Kwai'. Ni siquiera recuerda a 'El puente sobre aguas turbulentas', pero deben de reconocer que la situación roza tanto el absurdo que bien podría cambiarse el nombre de nuestra infraestructura por el de 'Puente de los Hermanos Marx'.